El niñ@ deberá seguir controles habituales por su pediatra de zona, además de los controles necesarios en el hospital después de la cirugía. La primera visita en el hospital suele realizarse a los 15 días del alta, con el objeto de valorar la herida quirúrgica, dar soporte a los padres y retirar el material si procede (normalmente se utiliza un tipo de sutura con material reabsorbible, con el que no se precisa la retirada de los puntos).

Posteriormente, las visitas sucesivas con Neurocirugía Pediátrica serían al mes, tres y seis meses de la intervención, para una valoración clínica (medir perímetro craneal, índice craneal y valorar desarrollo psicomotor) y solicitar una valoración radiológica (primero con radiografía simple de cráneo para valorar correcta evolución de las osteotomías). Si el niñ@ no requiere nada especial, la siguiente visita de control suele hacerse al año de la cirugía. Durante este proceso (habitualmente al año) también se realizará una Tomografía Computarizada con reconstrucciones óseas para disponer de un control más preciso de la unión de los diferentes elementos óseos del cráneo.